25 Abr APRENDIZAJE, METODOLOGÍA Y FLEXIBILIDAD

APRENDIZAJE, METODOLOGÍA Y FLEXIBILIDAD

Bienvenido, bienvenida a un nuevo podcast de Speak and Learn. Mi nombre es
Clara Arnuncio y, a través de este podcast, voy a ayudarte a mejorar tu español
de manera natural y divertida. Recuerda que, si nos escuchas desde nuestra
web, speakandlearn.es, al finalizar el audio encontrarás la transcripción y algo
de vocabulario que espero que te resulte muy útil.

Bienvenido, bienvenida a un nuevo episodio del podcast de Speak & Learn.
En el episodio de hoy vamos a hablar sobre el aprendizaje, los métodos y la
flexibilidad, pero, antes de comenzar déjame que te invite a nuestro próximo
evento, el seis de mayo, donde daré una clase de español gratuita a todos
aquellos que quieren empezar a aprender español. Es decir, nivel cero o
básico. El evento será a las 15:30 hora de Madrid a través de Zoom, os voy a
dejar el enlace por si estáis interesados que podáis registraros y solicitar
vuestra plaza. Date prisa porque son plazas limitadas. En esta clase os
enseñaré a utilizar los verbos más importantes y, sobre todo, tendremos
nuestra primera conversación en español. Intentaré ayudaros a dar eses primer
paso del aprendizaje del español.

Y ya que estamos hablando de aprendizaje empezamos con el episodio de hoy,
donde voy a hablar, como os decía, sobre aprendizaje, los métodos y la
flexibilidad. Hay una frase, español, que dice: “La práctica hace al maestro”. Es
un dicho popular que está un poco en desuso, la verdad es que ya no se dice
mucho, pero se utiliza para alentar a las personas a ser perseverantes en
aquello que quieran lograr. Pero yo me preguntaba ¿Hay algún estudio que
hable del efecto de la repetición, de la práctica y su efecto en el cuerpo
humano? Pues sí.

El estudio

Hay un grupo de investigadores en la Universidad de McGill, en Montreal,
Canadá, que le pidió a un grupo de músicos aficionados que se aprendieran
una melodía durante treinta minutos al día, durante cinco semanas. Y se
hicieron una resonancia magnética funcional, los resultados mostraron que,
efectivamente, se habían producido cambios en la corteza premotora y la
corteza parietal. Que es esa parte del cerebro relacionada con el aprendizaje
motor, con los movimientos, etc.

Pero, también, se descubrió que practicar no es suficiente en el aprendizaje, la
práctica no lo es todo. En el estudio se dieron cuenta de que también entraba
en juego la fatiga, que tiene un rol muy importante en la repetición porque
afecta a los mecanismos de aprendizaje y habilidades motoras del cerebro.
Descubrieron que el cansancio, la fatiga, la practica puede afectar a la

formación de recuerdos que ayudan a las personas a retener nuevas
habilidades que han aprendido. Es decir, sí que servía el repetir y repetir para
el aprendizaje motor, de los movimientos, pero no era el ideal, tampoco, para
aprender. Porque nuestro cerebro responde ante los estímulos y por eso
mucha gente falla a la hora de aprender algo, porque no está lo
suficientemente estimulada: Cuando no hay una buena razón que les incite a
seguir aprendiendo se rinden mitad de camino, tiran la toalla.
[Tirar la toalla quiere decir abandonar ¿okey? Es una expresión que utilizamos
para decir que abandonamos, que dejamos de intentar algo, ¿okey?]
Entonces, aquellas personas que no tienen una buena razón que les incite a
seguir aprendiendo tiran la toalla, mientras que, si una persona tiene una fuerte
motivación para tener éxito, hará lo que sea para conseguir su meta.

Una manera muy buena de mantener el cerebro estimulado es celebrar cada
pequeño logro. Y esto no lo digo yo, esto esta científicamente probado y
además funciona con cualquier campo, funciona con los deportes, funciona con
los idiomas, funciona con todo. No sé si os acordáis que hace una temporada o
dos, hubo un episodio del podcast en el que hablábamos de la importancia de
celebrar.

Si no lo habéis escuchado os dejaré también el enlace para que lo hagáis.

La importancia de celebrar esos pequeños logros porque hace que te mantengas
motivado. Es decir, en mi caso, yo quiero a final de año correr media maratón:
eso son 21 (veintiún) kilómetros. En enero, cuando me puse este objetivo no
era capaz de correr mas de tres, sin embargo, el domingo pasado conseguí
hacer mi primera carrera de diez kilómetros y, además, en menos de una hora,
es decir, fue un gran logro para mi y, después, fui a celebrarlo. Fui a desayunar
con mi mejor amiga, estuvimos las dos riéndonos mucho y fue un, una manera
de celebrar juntas que habíamos conseguido terminar nuestra primera carrera
de diez kilómetros y la verdad es que fue muy divertido.

Esto lo aplico ahora también al trabajo, me voy poniendo pequeñas metas y
cuando las consigo lo celebro. La importancia de celebrar. Pero vamos a volver
a la metodología y al aprendizaje. Seguro que habéis escuchado esa teoría de
que se necesitan mas de diez mil horas de practica para convertirse en un
experto en algo. Esto lo dice Malcolm Caldwell en su libro “Outliers”.
Cuando escuché esto me dio un poquito de bajón, me desanimé un poco
porque claro es… son muchísimas, muchísimas horas. También he escuchado
otra teoría un poco mas optimista de Josh Kaufman, autor de «personal MBA»,
que dice que pasar de no saber nada a poseer una destreza cuesta alrededor
de veinte horas de práctica, es decir, cuarenta y cinco minutos todos los días
durante un mes. Esta es muchísimo mas optimista como os decía, pero
tampoco sé si muy realista porque no creo que estudiando cuarenta y cinco

minutos todos los días durante un mes hable, por ejemplo, perfecto inglés.
Supongo que al final depende de lo que tú quieras aprender.

La metodología

Además, hay una diferencia entre el conocimiento intelectual y el desarrollo de
una habilidad. Y esto si que lo he podido ver yo después de cinco años o más
de experiencia enseñando español. Me encontraba con alumnos, me he
encontrado con alumnos, que tienen unos conocimientos de gramática
enormes y muchísimo vocabulario y, sin embargo, no son capaces de hablar,
no son capaces, no tienen el desarrollo de la habilidad, tienen el conocimiento,
pero no la pueden llevar a la práctica, no son capaces de hablar, no tienen esa
habilidad.
Lo que está claro es que aprender algo supone pasar por distintas fases: Ser
torpe el principio, cometer errores, corregir esos errores y volver a intentarlo a
después.

Cuando comencé con mi proyecto me obsesionaba mucho la
metodología, crear mi propia metodología, porque mi experiencia con el
aprendizaje de idiomas había sido terrible entonces me obsesioné un poco con
crear una metodología que fuera muy diferente a lo que a mi me habían
enseñado.
Es verdad que, en España, los idiomas, en mi opinión se enseñan regular
porque se enseña muchísima gramática y nada de práctica. Entonces al final,
como decía Aristóteles, en el equilibrio esta la virtud.

Pero al principio yo sí que me obsesioné con no enseñar nada de gramática, quería hacer, conseguir una
metodología que fuera muy natural, aprender como los bebes ¿vale?
Porque, ¿Cuál es el propósito de un idioma? Pues comunicar, la forma más
común de comunicar es hablar, y hablar es algo espontaneo, no necesitas
saber eeh una estructura gramatical.

La flexibilidad

Con el tiempo me he dado cuenta de que yo tengo que ser un poco mas
flexible. Sigo creyendo que lo más importante es hablar, pero ahora soy
consciente de que muchos alumnos necesitan una explicación, a veces
gramatical, para ver las cosas con una mayor claridad, porque al final yo estoy
enseñando a adultos, y la gran mayoría de los adultos conocen las estructuras
gramaticales de su idioma, entonces si pueden compararlas con las del
español, eso en muchos casos va a servirles de ayuda para ver todo con una
mayor claridad y no cometer errores. Porque, además, el inglés no es un
idioma fonético, pero el castellano si, existe una relación entre lo escrito y lo
pronunciado, entonces es un poco mas sencillo.

Antes os decía que he tenido alumnos que tenía unos conocimientos de
gramática muy, muy altos y que sabia muchísimo vocabulario y, sin embargo,
no eran capaces de hablar, pero también me he encontrado con alumnos que
hablan mucho, pero cometen errores de base, que no tienen esos
conocimientos de base bien. Entonces aquí sí que nos encontramos con un

problema, cuando tu aprendes algo mal y lo interiorizas, es decir, lo aprendes
de verdad, ya lo tienes muy, muy interiorizado corregirlo es muy complicado,
necesitas desaprender para volver a aprender y eso a veces no es fácil.

Y eso me ha pasado a mí también con el inglés, cuando yo llegué a Inglaterra y
empecé a hablar había cosas que decía mal pero que como la gente entendía
pues nadie me corregía y yo lo veo también en mis alumnos, muchos con
niveles muy altos cometen errores muy básicos porque nadie les ha corregido.
La gente les entiende y como entienden pues no dicen nada y esa persona
continúa cometiendo los mismos errores siempre.
Claro, ya los tienen muy aprendidos, muy interiorizados, va a tocar
desaprender para volver a aprender.

Muchas veces me han preguntado: Clara ¿Qué nivel te gusta enseñar más, el
nivel alto o el nivel bajo? Y la verdad, es que no se contestar porque cuando
coges a alguien con un nivel cero, un nivel básico es muy gratificante enseñar
esas bases y que esas bases sean muy fuertes para que después ya aprendan
bien y no cometan esos errores que veo en, como os decía antes, en los
alumnos con niveles más altos. Entonces pues eeh cada nivel tiene sus cosas
buenas y sus no tan buenas. Pero a mí me encanta enseñar, con los niveles
muy alto puedes hacer cosas muy divertidas, muy amenas, pero me encanta
también enseñar a niveles más básicos, porque ahí tu puedes conseguir que
tengan una base muy buena y no cometan errores eeh a largo plazo, no sé si
me he explicado bien.
Bueno, como os decía, en el equilibrio esta la virtud, yo empecé muy eeh
cuadriculada con mi metodología.
[Cuando dices que alguien es cuadriculado es que tiene una idea y no cambia
esa idea ¿vale? Que es muy cuadriculado, que esta metido en un cuadro y las
cosas tienen que ser así y así y no cambian de opinión]
Bueno, creo que hay que ser mas flexible, yo he aprendido a no ser tan
cuadriculada y ahora, mi metodología está muy centrada en la conversación,
pero también meto esos conocimientos a veces necesarios de gramática, de
vocabulario etc. Por supuesto intento hacerlo de manera muy práctica, pero ya
no lo descarto. Soy muchísimo mas flexible porque, como os decía, además
creo que cada uno tiene maneras de aprender diferentes, y hay que encontrar
la mejor manera para cada uno, hay a gente que le funciona mejor y a gente
que le funciona peor. Para cada alumno hay que intentar encontrar esa
metodología.

Antes de despedirme te recuerdo que si quieres eeh que te enseñe un poquito
de esa metodología y quieres una clase gratuita de español conmigo y tu nivel
es básico o cero o conoces a alguien que quizás quiere aprender y mejorar y
su nivel es básico o cero , el próximo seis de mayo haré una clase gratuita de

español a través de Zoom a las tres y media hora de Madrid, si no puedes venir
no te preocupes porque la clase va a quedar grabada, puedes escucharla
después , y como te decía también si tu nivel es más alto, tampoco te
preocupes porque haremos un evento, otro evento de clases gratuitas dentro
de una semanas para esos niveles mas altos.
Ahora si me despido, espero verte en el próximo episodio y si quieres
mantenerte al tanto de todas las cosas que voy organizando , registrarte en
nuestra web, speakandlearn.es para estar informado de todo. Nos vemos en el
próximo episodio, un abrazo ¡Adiós!

Vocabulario

Desuso: Dejar de usar o de acostumbrar algo. Usado más como pronominal.

Fatiga: Cansancio o hastío.

Estímulo: Cosa que estimula a obrar o funcionar.  Estimular: Hacer que alguien quiera hacer algo o hacerlo en mayor medida.

Dar bajón: disminución rápida y fuerte de algo en su intensidad, su cantidad o su valor, o de alguien en su salud, estado de ánimo o energía.

Gratificante: Adjetivo. Que brinda satisfacción, goce o gratificación. Se dice de una acción u obra que hace sentir bien ética o moralmente a quien la ejecuta.

Ameno: Grato, placentero, deleitable.

Descartar: Excluir o eliminar a alguien o algo. Rechazar, no admitir algo.