Sobre como el deporte y el ejercicio pueden ayudarnos con nuestro español

Sobre como el ejercicio y el deporte nos pueden ayudar con el español

Sobre como el ejercicio y el deporte nos pueden ayudar con nuestro español.

Bienvenido, bienvenida a un nuevo podcast de Speak&Learn. Mi nombre es Clara Arnuncio y a través de este podcast voy a ayudarte a mejorar tu español de manera natural y divertida. Recuerda que si nos escuchas desde nuestra web speakandlearn.es al finalizar el audio encontrarás la transcripción, y algo de vocabulario que espero que te resulte muy útil.

Hola a todos. En el podcast de hoy hablamos sobre como el ejercicio y el deporte pueden ayudarnos con nuestro español. La verdad es que es un tema extraño, lo sé, y es extraño sobre todo viniendo de mí, qué durante muchos, muchos años, no practiqué deporte, y me costó mucho entender que el deporte y el ejercicio en realidad puede ayudarnos con todo.

Cuando yo era niña, era bastante torpe con todos los juegos de pelota, y no era una niña especialmente deportista. Es cierto que como soy delgada y bastante musculosa, pues corría mucho, pero, ni me gustaba ni era especialmente hábil, es más, era bastante torpe, de hecho, me echaron del equipo de baloncesto. Y mis extraescolares y mi tiempo fuera del colegio, lo dedicaba más a la música y al conservatorio. Pero sí que recuerdo haber visto un cuadro en el que mucha gente que a mí me interesaba, muchos genios o gente relevante de la música o de la ciencia, enseñaban la rutina que llevaban ellos en el día a día, y me sorprendió ver, que la gran mayoría de ellos practicaba deporte de manera regular. De hecho, recuerdo pensar, recuerdo que me sentó hasta mal, porque yo era en ese momento, nada deportista.

No fue hasta que yo cumplí 29 años y nació mi primera hija, cuando yo empecé a practicar deporte. Cuando nació Claudia tuve una depresión postparto y entonces, una amiga mía psiquiatra me dijo: «Clara tenemos 2 opciones. Una, te medicas, tomas medicamentos y entonces tienes que dejar la lactancia, o 2, empiezas a hacer deporte. Y entonces al hacer deporte segregarás esas hormonas como la serotonina, la dopamina o la norepinefrina, que son las hormonas asociadas con las emociones y el estado de ánimo, y que te van a ayudar a que esta depresión postparto se te pase». Así que le hice caso, empecé a salir a correr, y en una semana me encontraba ya muchísimo mejor.

La verdad es que yo hasta ese momento siempre había pensado que la gente que realiza deporte lo hace para verse más guapa o por salud física de intentar evitar infartos de corazón y ese tipo de cosas, pero hasta ese momento no había sido consciente de lo importante que es también para la mente, para tener una buena salud mental.

Volviendo al tema del cuadro con toda esa gente relevante que practicaba deporte, intenté buscarlo, pero no lo he encontrado, pero si que es verdad que he encontrado muchísimas referencias de gente que practica deporte, de genios y gente sobresaliente que practicaban deporte en su día a día.

Por ejemplo, Ernest Hemingway era un amante del boxeo. Julio Cortázar era un amante del tenis, igual que Tolkien, que tuvo que dejar el tenis por una lesión. Alan Turín, además de ser el padre de la computación moderna y además de ser un genio en los números, también lo fue en las carreras de fondo. Su marca quedó solo a 11 minutos del ganador de los JJOO de Londres de 1948 y ese mismo año consiguió superar al atleta que consiguió la plata, Tom Richard, en una carrera de campo a través.

Por ejemplo, Marie Curie, era muy aficionada a la bicicleta y dicen que se tomaba muy en serio el deporte. Ramon y Cajal, premio nobel de medicina practicaba el culturismo. El matemático Harald Bohr jugaba al futbol y consiguió la medalla de plata en las olimpiadas de Londres en 1908. Su hermano Niels, nobel de física, también juagaba al futbol.

En fin, podríamos citar a muchísimas personas relevantes que en su día a día tienen muy normalizada la práctica deportiva.

Una reciente investigación de la Universidad de Granada revela que los adolescentes que practican ejercicio físico en el instituto sacan mejores notas, sobre todo mejores notas en matemáticas. Cuando leí esto me hizo mucha gracia porque yo no practicaba deporte y además era malísima con las matemáticas, me costaba muchísimo. No sé si tiene algo que ver, pero me hizo muchísima gracia ver esto. Entonces, yo no era, no fui consciente hasta que cumplí 30 años, 29-30 años, de la conexión tan grande que hay entre el cuerpo y la mente. El cuerpo influye en nuestra mente y al revés. De hecho, ¿Cuántas enfermedades se somatizan? ¿Cuántas veces nos ha pasado que estamos nerviosos, o estresados por alguna razón y entonces te duele la tripa, o tienes problemas en la piel? ¿no? Por ejemplo.

La psiquiatra Rosa Molina habla de estudios que demuestran que bueno, a pesar de que siempre hemos relacionado el cuerpo con el movimiento y el conocimiento con la mente, la ciencia ha demostrado que el movimiento del cuerpo va ligado también al aprendizaje y a la capacidad de pensar, etcétera. Ella habla de un estudio en la que relaciona la cadencia y el ritmo con la sincronización, ósea que la cadencia y el ritmo del cuerpo se sincroniza con el cerebro, y esto hace que favorezca al pensamiento.

El movimiento nos ayuda a relajarnos, ayuda a la mente, etcétera. Y habla de un experimento que se hizo en el que se estudiaba a personas que cuando escuchan una conversación o una conferencia realizan movimiento, por ejemplo haciendo garabatos en un papel. O que mientras escuchan una conversación caminan, mientras están hablando por teléfono caminan y andan. Bueno, pues se ha demostrado que todos esos movimientos hacen, esas actividades, nos ayudan a retener la información. Hacen que retengamos mejor toda la información.

Y esto se lleva también al deporte. El desarrollo evolutivo natural, requiere del movimiento. El ejercicio según ella alimenta las neuronas, favorece el tejido neuronal, y además es un regulador emocional, por eso en su día a mí la psiquiatra me dijo que tenía que practicar deporte para superar la depresión postparto.

La gente que practica ejercicio tiene más capacidad de procesamiento y es capaz de mantener la atención y la concentración mejor, y, además, tiene más capacidad de memoria. Yo sin saberlo, cuando leí esto me pare a pensar, pues, por ejemplo. Cuando yo, soy una gran consumidora de podcasts, bueno pues siempre escucho los podcasts, también en inglés, cuando salgo a correr, o cuando voy a hacer deporte, y la verdad es que, bueno, yo sí que tengo buena memoria, pero no sé si esto ayuda a este tipo de cosas.

Hay también un científico, Heming Böcker, director del grupo de neuroimagen clínica funcional, de la Universidad de Born en Alemania, que dirigió una investigación a través de la cual, pudieron ver gracias a técnicas de neuroimagen, pudieron mirar dentro de un cerebro humano de forma no invasiva y medir los cambios funcionales y estructurales asociados al ejercicio.

Él llega a la siguiente conclusión. Él dice que la famosa cita de “men sana in corpore sano” tiene solidez. Es absolutamente cierta, porque el ejercicio favorece la autorregulación del cerebro, mejora los mecanismos neuro generativos y reduce los factores de riesgo cardiovascular que producen daños cerebrales.

Así que, lo miremos por donde lo miremos, el ejercicio es bueno.  Y es bueno para la cabeza, y es bueno para la mente. Además, también es bueno porque nos ayuda con la fuerza de voluntad.

La fuerza de voluntad

Todo objetivo requiere de fuerza de voluntad. Todo requiere de constancia y de perseverancia. De esto también habla la psiquiatra Rosa Molina. Ella dice que la fuerza de voluntad tiene un poco de componente hereditario, pero, es algo flexible. No es algo que no se pueda modificar. No es estático, se puede trabajar, y se trabaja a través de la repetición. Empezando con objetivos pequeños, y a partir de ahí vas subiendo.

Ya hemos hablado de esto en otros capítulos del podcast ¿no? Cuando además creo que lo comparábamos con correr una maratón. Si quiere correr una maratón no puedes salir a correr directamente 42 km. Tendrás que empezar corriendo primero 5, luego 7, luego 10, y así sucesivamente.

Bueno, pues con el aprendizaje de idiomas es cierto que pasa lo mismo. Si no eres constante y no tienes fuerza de voluntad es muy difícil que llegues a avanzar. De esta manera, tanto eh, creo que el deporte y la actividad física, y el ejercicio nos pueden ayudar a ser constante y perseverantes. Y también a desarrollar esa constancia a la hora de aprender el idioma, de aprender cualquier cosa en realidad.

Es una conclusión que quería compartir con vosotros, es algo que a mi me ha costado mucho tiempo entender. Como el ejercicio ayuda a la cabeza, ayuda a la mente. Nos ayuda también con la autoestima y con la confianza, que es algo también muy importante a la hora de enfrentarnos a un idioma. Sobre todo a la hora de hablar en ese idioma. Y es en todos estos puntos donde el ejercicio nos puede ayudar.

Espero que te haya gustado. Recuerda que si nos escuchas desde nuestra web speakandlearn.es podrás ver la transcripción del audio y algo de vocabulario. ¡Nos vemos en el próximo capitulo!.

¡Adiós!

 

 

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